No hay edad para ser escritor

Un escritor comparte con sus lectores experiencias, sentimientos, y conocimientos que nos permiten reflexionar y forjar nuestras propias ideas.
El señor Lucino Salazar Cuel  comparte con nosotros sus escritos, y nos motiva a seguirlo como ejemplo ya que a pesar de su edad continua realizando actividades que dejan huella y grandes conocimientos que con el paso del tiempo permanecerán.

Soy un niño, señor

Soy un niño, señor.
Unos de tantos millones de años,
que gritan, lloran o ríen por el mundo.
No importa mi nombre,
mi raza, credo, ni color.

Soy un niño, señor.
Un pedacito de cielo.
Una gotita de agua.
Una cajita de dulces.
Una risita de ángel.
Un caballito de carrusel.

Soy un niño, señor
la dulzura y alegría.
La gracia y una sonrisa.
Yo te imploro, pido, ruego,
por la vida y por el mundo,
como un símbolo de amor.

Soy una carita dulce
y unos ojitos buenos;
Salto brinco, corro, juego,
como, duermo y ando sucio,
oh; travesura incansable…

Soy de la vida ilusión,
del hogar como un regalo,
el alma de mi contagio,
de los pueblos y la patria,
de la esperanza y bendición.

Somos los niños del mundo,
víctimas sin piedad ni amor,
del hambre y de las guerras,
la maldad y la pobreza,
drogas, sexo y explotación.

… ¿serán así los niños
de tu evangelio, señor?.

juuu

Los que triunfaron en su derrota

¡Que grandes fueron en su pequeñez!

¡Que ricos son en su pobreza!
La negación de su vida fue el motivo
de su propia afirmación. Sursum corda.
La obra máxima de un autor mínimo.

El hombre se levanta a pesar de sí mismo.
Podrá morir el cuerpo, el espíritu nunca.
La vida es un don; el destino una conquista.
Ser mortal es común; la gloria inmortal, no.
Arribar a la meta es el éxito del triunfador.

Siempre arriba de sus miserias y fracasos.
Sobre el mudo de la ignorancia y la justicia.
Imitad, lectores, un ejemplo tan hermoso.

Dante. Ovidio, Cicerón, Mío Cid, Napoleón,
sufrieron el destierro. Sócrates bebió la cicuta.
Huérfanos: León Tolstoi, Bécquer, Dostoievski, Poe.

Altamirano y Juárez no hablaban español, Esopo
era esclavo. Alarcón un jorobado. Balzac murió en
la miseria. Abandonados: Dickens y Sor Juana.

Teresa de Ávila, San Juan de la Cruz, Díaz
Mirón, Fray Luis de León estuvieron en la cárcel. Juana de Arco,
quemada en la hoguera. Cautivo en Argel estuvo Cervantes.

Homero, ciego de nacimiento. Huérfano de madre, Víctor Hugo. Una
mujer, Mme, Curie descubre la radioactividad. Colón regresó a España
cargado de cadenas. Homosexuales: Miguel Ángel, Julio César, Oscar
Wilde y Paul Verlaine.

Jesucristo nació en un pesebre. Beethoven padecía sordera. Acuña,
Isaacs, Valera, Stendhal, Flaubert y Chenjov, decepcionados suicidas.
Fdo. De Rojas judío perseguido. Eran alcohólicos: Rubén Darío Manuel
José Othón y Edgar Allan Poe.

Morelos fue un arriero analfabeta. León Felipe un exiliado. Lope
de Vega, Góngora y Ángel Garibay, sacerdotes. Dante no se casó con su
musa Beatriz. Cecilia Böhl era Fernán Caballero. Cervantes y Octavio
Paz, Premio Nobel, fracasaron en su matrimonio.

Benito Juárez, pastor de ovejas, García Lorca, asesinado por ser
republicano. Sartre, rechazó el Premio Nobel, Borges, ciego en sus 20
últimos años. Moliere, despedido de su casa, por no ser abogado. John
Milton ya ciego, leía y escribía, auxiliado por sus hijos.

Sor Juana, una monja autodidacta. Santa Mónica, 9 años pidiendo
por su hijo: San Agustín. Primera Santa mexicana: Sor María Sacramentado.
Teresa de Calcuta, amó a los más pobres de los pobres.

Hidalgo, Galileo y Gibran fueron excomulgados. Azorín aborrecía
la escuela. Autodidactos: Lincoln, Rulfo, Arreola y Spota. Socialistas
Neruda, Guillén y Carpentier. Nervo y López Velarde, exseminarista.

Nietzsche murió en la demencia. Gandhi sin armas liberó la India.
Diplomáticos: Gorostiza, Carlos Fuentes y Octavio Paz. Indigenista,
Rosario Castellanos. Shakespeare, un ignorado Campesino.

Ellos son nuestro reflejo. Dios es un poco cada uno.
Y, tú, teniéndolo todo, ¿qué has hecho de tu vida?

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